Entrenando la atención, es posible aprender prácticas que generan un incremento del "darse cuenta" así como un cambio en la forma de relacionarse con todas las experiencias tanto internas (emociones, pensamientos, sensaciones) como externas (entorno), favoreciendo una respuesta más adecuada a las diferentes situaciones de la vida y un menor sufrimiento ante los momentos difíciles. 

Con este programa, el alumno entrena sus habilidades socioemocionales a través de un aprendizaje activo y fundamentalmente experiencial.   En definitiva, el objetivo es un equilibrio cuerpo-mente y la atención plena se presenta como una herramienta eficaz o mejor aún, como un nuevo modo de vida mucho más consciente y saludable.   

Las 8 sesiones son semanales y su duración es de 1, 5 horas por sesión en la que se expone la teoría, se realizan prácticas y se comparten experiencias que facilitan la comprensión de lo aprendido. Después de cada sesión, el alumno recibe instrucciones para practicar por su cuenta hasta el siguiente encuentro.